Dentro de las "Jornadas Hispano Visigodas", organizadas por el Ayuntamiento de Cabra, junto con la "Asociación Egabro 1240", impartí el sábado 5 de marzo de 2016, a las 12 de la mañana, una conferencia-presentación de mi libro "España, vieja patria", que constituyó un éxito de ambiente, interés cultural, seguimiento y venta.
A juicio de los organizadores del acto y por manifestación expresa de los asistentes, a la firma de ejemplares, la charla fue amena e interesante.
Tuve el gran honor de que el concejal de Cultura de dicho ayuntamiento, don José Luis Arrabal, en nombre de la ciudad de Cabra, la institución y el alcalde, me hiciera entrega de un diploma-reconocimiento, por el que me sentí sumamente agradecido.
Pronuncié, a propósito del capítulo del libro referido al euskera, unas palabras acerca de la antigüedad prerromana de esta localidad y de su nombre, Egabro, que, por cierto, fue obispado antiguo y altomedieval y ceca, con un magnífico triente de oro de Egica y Witiza, reyes de Hispania, y fechada hacia el año 700, que se conserva en el Museo Arqueológico Municipal. Para la etimología y conformación del nombre de EGABRO, del que derivó en la Hispania musulmana QABRA y luego CABRA, aventuré una propuesta más:
/ega-ibar-a/>/ega-íbero/>/egabro/, "valle, vega del Ega", topónimo puramente ibero-vasco, pues, además de /ibai/, /ibar/, hay que tener en cuenta que /ega/ (y la voz euskérica /hega/, relativa a "volar", "alero", "ladera") es nombre común de numerosos ríos ibero-vascos, como el Ega navarro, que pasa por Estella; el Ega portugués que pasa por Coïmbra; el Ego guipuzcoano, que pasa por Éibar y Elgóibar (página 108 de "España, vieja patria").
A continuación, procedí a la firma de libros, con 22 ejemplares vendidos.
El domingo, invitados mi esposa y yo por el ayuntamiento, la citada asociación y la Hermandad de San Rodrigo, patrón de Cabra, asistimos a una impresionante Misa Hispano-Mozárabe, cantada en latín por el coro de cámara de la Fundación Aguilar y Eslava.
Quiero expresar mi gratitud, de forma especial, al profesor egabrense Manuel Chacón Rodríguez, coordinador y puntal para que todo esto haya sido posible, quien, además, me presentó y acompañó en el acto.
La próxima presentación del libro, si no se adelanta alguna más, será en Cieza (Murcia), en abril.
